Suspiros

Me encuentro en un dilema económico - dijo con pleitesía - gano mucho dinero en un trabajo que odio y que lapida a diario mis ilusiones.  No se preocupe por nimiedades - le respondieron de forma socarrona - usted tiene una misión en la vida, ande, cobre su cheque y abone una letra más a la mensualidad que paga por su mansión a la cual aún le quedan 15 años para pagar. Recuerde que sus ilusiones están devaluadas en éste mercado, donde es tanta la oferta que casi nadie apuesta un peso para invertir en castillos de arena. Respire profundo y vuelva a sumergirse por diez minutos en el estanque, que ya llegará su fin de semana para que goce de breves instantes donde pueda emular como es la ociosa libertad.

Adquiera un pasatiempo mientras tiene hijos, cuide de su salud y no haga dramas. En éste momento el mundo tiene muchos peores tormentas que la llovizna que le lleno su vaso.

Efemerides

La vida es un maravilloso accidente, una oportunidad de resplandecer. La paz con la que viví un par de semanas de vacaciones me permitieron reflexionar poco, sabes, temo mucho que el tren de vida que llevo termine por atrofiar mis ilusiones - el mayor tesoro que tengo - pero confío en que éste silencio sea porque de un tiempo acá dejé de auto sabotearme y miro de soslayo la tormenta.
Mi temor principal es que se haya sublimado aquella sustancia de la que poco se ha investigado, que se ubica en el corazón y nos permité amar beligerantemente a donde quiera que vamos.
Los antiguos dicen que esa sustancia (como el litio en el cerebro) se acaba después de muchos años o después de muchos insabores, también cuando nos resignamos.
Las letras se enferman en cama cuando se es feliz.