23 ene 2011

Mi corazón y sus Palabras

No es risa, ni es solo una canción, no es juego ni tentación es todo mi corazón, lo que ofrezco no es la retorica gastada de un galán común, te ofrezco mi vida, mi pasión, mi don, te ofrezco si te gusta, todo lo que soy. Con todo lo que aprendí, con todo lo que crecí, con todo lo que a un tiempo, cuando te miré y te volviste única, cuando un día tuve la intempestiva necesidad de buscarte y encontrarte, cuando empecé la mejor obra de mi vida, te regalo mi universo si lo quieres.

No es que para mi seas una diosa, eres una princesa alcanzable, a la que le canto todos los días mis pasiones, esperando un día su mirada tierna, esperando un día su calor y su fuego, esperando que me des el regalo sutil de tu belleza y de un camino juntos, ambiciono mucho, casi siempre ambiciono mucho, pero la vida es de los que nos atrevemos a reescribir los textos que otros creen imposibles, los que nos atrevemos a dar todo por un te quiero, a los que buscamos y perseveramos con versos, a los que seguimos a nuestro corazón inquieto, cuando sabemos que solo en una persona conoceremos el descanso y la pasión al mismo tiempo.

Iluminas mi día con tan solo saber que escuchas mis cantos, Iluminas mi existencia con tan solo la belleza con la que te imagino, ayer soñé contigo, esa no es novedad tampoco, eran cosas mas humanas, más rutinarias pero en el sueño, eran tan buenas como yo siempre las imagino, es una sensación de completitud y de plenitud que llenan aún en las actividades mas ordinarias, eres princesa aún en la ciudad bulliciosa, eres princesa como lo eres desde el escritorio donde te escribo, eres princesa en las estrellas que tienen nuestros nombres. Sueño, sueño mucho, porque el primer paso de todo gran proyecto es soñar, sueño pero despierto a punto de tocar el dulce pliegue de tus labios que con un poquito de miedo acceden a besarme, pesado ardor y dulce tentación.

Ningún corazón es culpable de sentir algo mucho menos si se trata de amor, si es tu caso no te resistas deja fluir lo que tenga que llegar, aunque sea una revolución, aunque sea un despertar, porque no te quiero esclava, te quiero libre, para amarte con poemas, con mi vida, con las tantas cosas que en los albores de nuestra existencia, alguien escribió en nuestras almas y nos dio un tiempo para ser esclavos y nos dio otro para amar libres, con la esencia de las cosas que somos, no con sentimientos huecos, ni con banalidades ni juegos tontos, amar con la seriedad que tu corazón y el mío reclaman, si con todo lo dicho no te convenzo, ojalá que con decirte lo más sincero que puedo lo logre, te quiero tanto! Mia Musa

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